El vínculo entre los abuelos y los nietos
Los abuelos ocupan un lugar muy especial en la vida de los nietos. Generalmente, luego de los padres, suelen ser las figuras más significativas para ellos. Cumplen un papel muy valioso, pues cuentan con la gran sabiduría de los años y las lecciones aprendidas de sus propias experiencias como padres. Esto hace que los abuelos estén en condiciones de ser grandes colaboradores y consejeros, posibilitando muchas veces una mayor integración familiar.
Fuente: www.saborysalud.com
Hay que reconocer, que entre abuelos y nietos existe un lazo especial. La mayoría de los abuelos ocupan un lugar muy importante en el plano emocional de los nietos. Basta con pedir a los niños un dibujo de su familia o preguntarles por ella, para que gran parte de ellos incluyan a sus abuelitos como figuras indispensables.
Los abuelos además de cuidar voluntaria y desinteresadamente a los nietos, cuando los padres están muy ocupados por su trabajo o ausentes por otras razones; entregan una dosis extra de cariño, una dosis que cae muy bien al bienestar emocional de los nietos.
Relación abuelo-nieto
Existe una relación muy especial entre estas dos generaciones, con características que muchas veces no se dan en las relaciones padres-hijos. Por ejemplo, algo que fortalece este lazo, es que muchos abuelos ya han salido de los años altamente competitivos a nivel laboral. Esto les permite tomarse con más calma y con menos presión el diario vivir. Igual sucede con los nietos, al menos los menores de edad que no han entrado aún al mundo de las presiones escolares. Se facilita así que ambas generaciones pueden compartir más, recrearse juntos, tener largas conversaciones, etc; sobre todo si los abuelos están en un rol de cuido de sus nietos.
Lo anterior no quiere decir que los abuelos no cumplan con un papel de enseñanza, pues aunque no es su obligación, con las mejores intenciones suelen transmitir a sus nietos, los conocimientos que han acumulado de sus experiencias vividas a lo largo de los años. Ese saber único que la vida les ha dado, y que quizá en ninguna escuela se va a enseñar, es una de las mejores herencias que un abuelo puede dar a sus nietos.
Otra dinámica común en estos días, son los abuelos asumiendo roles que no les corresponde. Por ejemplo, cuando la paternidad o maternidad está ausente, o en casos en que la madre es soltera, muchas veces los abuelos llegan a asumir el rol de padres.
Cuando unos abuelos ejercen las funciones que normalmente corresponden al padre-madre, se crea una situación ambigua. Para el niño, los abuelos son objeto de un cariño particular y están investidos de una autoridad distinta de la de sus padres. Si se mezclan los papeles, esto puede traer confusión el niño(a) en la inversión de roles, provocando que los nietos vean a sus abuelos como padres y a sus padres como hermanos o figuras secundarias.
Esta mezcla de roles, suele ocasionar que el niño/a no sepa responder a los límites del todo, producto de la confusión que se crea. El niño/a ante esto, necesita saber y tener la seguridad de que es su madre o padre quien representa la autoridad y la firmeza, para sentirse seguro.
Los límites con los nietos:
Es común que padres y abuelos no estén de acuerdo en asuntos de disciplina, sobretodo cuando los abuelos por amor a sus nietos, suelen consentirles comportamientos que los padres, también por amor, no permiten. Estos desacuerdos pueden llegar a provocar tensión en la familia y los nietos terminan siendo los más afectados.
Es importante que los abuelos y los padres se comuniquen mucho en cuanto a este tema. Sin embargo, hay que recordar que los papás son quienes tienen el deber de educar a sus hijos, por lo que las reglas y los límites que ellos establecen deben respetarse. Es crucial que no se desautorice a los padres o se desacrediten las normas que ellos han establecido con sus hijos.
Ser abuelos de adolescentes:
EN CUANTO A LÍMITES ES IMPORTANTE RECORDAR:
No desacreditar las reglas de los padres.
Cada vez que se vaya a discutir un asunto de disciplina con los padres, es importante que los nietos no estén presentes.
Aceptar la responsabilidad de cuidar a los nietos, es algo que debe pensarse bien. Es importante que lo haga sólo si siente deseos de hacerlo y si no tiene inconvenientes u otras prioridades que atender antes.
Su principal función como abuelo es disfrutar a sus nietos y divertirse con ellos.
No es lo mismo ser abuelo de niños pequeños, a serlo de adolescentes. Sin embargo, con los adolescentes, los abuelos cumplen también una función vital y son muy importantes en esta etapa de la vida de sus nietos. Quizá la función de cuido o vigilancia no sea una prioridad, como si lo es con los nietos menores, pero como compañía y soporte emocional, los abuelos pueden ayudar enormemente a los jóvenes.
El joven que sabe que sus abuelos están ahí, dispuestos a escucharlo sin juzgarlo, sin traicionar su confianza, sin una función de autoridad; va a sentirse seguro y enriquecido con los consejos de personas mayores y con experiencia. Este aporte es muy necesario, sobretodo cuando los adolescentes lo primero que tienden a buscar, es el consejo de los amigos o personas fuera del hogar, que no necesariamente van a transmitirles lo mejor. De ahí la importancia también de que los propios padres promuevan siempre el que haya una relación cercana entre los nietos adolescentes y sus abuelos.
Los adolescentes suelen tener preguntas sobre la vida y sobre temas que justamente los abuelos tienen mucho que contar. Además, es bueno que los abuelos se informen y se instruyan acerca de esta maravillosa etapa de la adolescencia, ya que ser adolescente hoy en día, no es lo mismo a serlo en décadas anteriores.
En una misma “sintonía” con los nietos:
Es muy importante que los abuelos tengan una activa participación en la vida de sus nietos. De ser posible, acompañarlos a sus actividades escolares o de entretenimiento, invitarlos a la casa y que lleven a sus amigos para interactuar con ellos también. Esto permite un gran acercamiento.
No se olvide de usted:
Para sintonizarse con sus nietos:
Quiera y ame a sus nietos como son, no por lo que usted piensa que deben ser.
Disfrute a sus nietos, diviértase con ellos. Acompáñelos en sus actividades, participe de sus logros.
Sea usted mismo, pero no los critique, sino aprenda también de ellos.
Escuche su música y vea sus programas favoritos, pero también invítelos a escuchar sus historias y experiencias.
Cuando hable con ellos:
Procure ir al grano, sin muchos rodeos o repeticiones que puedan distraerlos o aburrirlos.
Trate de llamar su atención con personajes interesantes o anécdotas curiosas
Evite las quejas o hablar de problemas de salud.
Hábleles con emoción y entusiasmo, pero también recuerde escucharlos con mucha atención.
Muchos abuelos con gran entusiasmo colaboran con el cuido de los nietos y se sienten incluso muy realizados con esta labor. Sin embargo, no hay que olvidar que sus vidas no son para entregarlas totalmente a los nietos. Ya habiendo criado a sus propios hijos, es ahora cuando más pueden dedicarse a sí mismos y a los proyectos o metas que no se habían podido alcanzar antes.
Por ello, los abuelos no deben sentir culpa si no pueden cuidar siempre a sus nietos y si quieren dedicarse también a sus propios proyectos u ocupaciones. En esta etapa de la vida, es cuando más tienen que consentirse a sí mismos e ir en busca de esos sueños que habían quedado en espera. Los nietos también llegarán a valorar y admirar mucho la superación de sus abuelos.
Viviana Hidalgo