Aprender a respirar
Aprender a respirar, con trucos sencillos que te ayudarán a la hora de disfrutar de una mejor respiración y vivir una vida mucho más tranquila y pausada.
Respirar es un acto normal, fundamental e inevitable para vivir, que por automático muy pocas personas tienden a ser conscientes de él, especialmente de la importancia que, para la salud, tiene respirar bien.
La respiración aumenta en frecuencia cuando, por ejemplo, nos sentimos nerviosos, ansiosos o tensos, especialmente cuando nos encontramos ante una situación que nos causa temor o tensión.
Pero la respiración puede igualmente ayudarnos a la hora de disfrutar de una buena salud; sobretodo a la hora de relajarnos y de disfrutar de una vida emocionalmente estable.
No obstante, lo cierto es que muy pocas personas saben cómo respirar. Por ello, aprender a respirar es una opción recomendable, especialmente para que pueda ayudarnos como estrategia al afrontar momentos en que nos sintamos nerviosos/as.
Aprender a respirar: pasos sencillos
1. Siéntate en un lugar en el que te sientas cómodo/a.
2. Hazlo con las piernas cruzadas.
3. Inspira a la vez que levantas los brazos lentamente.
4. Cuando tus brazos estén elevados, déjalos así un segundo.
5. Suelta el aire despacio a la vez que bajas las manos.
Lo ideal es que recuerdes cómo has respirado con este ejercicio, para que lo repitas cada vez que lo necesites. Y no olvides que respirar pausadamente te ayudará a evitar el estrés, la ansiedad, y sobretodo los pensamientos obsesivos y perniciosos.
Como ves, aprender a respirar es en realidad sencillo, aunque es cierto que en los primeros momentos puede costar un poco. La clave, por tanto, es comenzar a practicar la respiración poco a poco, empezando en un lugar tranquilo -por ejemplo- después de un día ajetreado o estresante, en un lugar de nuestra casa en el que nos sintamos a gusto, y hacerlo durante 5 a 10 minutos (es normal que en los primeros días nos cueste un poco más encontrar cierta tranquilidad).
Así, poco a poco podemos ir aumentando el tiempo de relajación hasta llegar a los 30-60 minutos, que es lo ideal para conseguir una relajación física y mental plena.
Fuente: http://www.naturpsico.net/