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Biopuntura, una técnica natural que trata con éxito lesiones y dolores

Biopuntura, una técnica natural que trata con éxito lesiones y dolores

Con jeringas que tienen agujas ultrafinas se inyecta una mezcla de sustancias naturales que recuperan lesiones deportivas y que también sirven para tratar alergias y sinusitis.

Fuente: www.emol.com

 

Un problema que enfrentaba a menudo la doctora Paola Ritter era no poder infiltrar con corticoides a los pacientes diabéticos que habían sufrido una lesión, ya que este medicamento les aumentaba el azúcar en la sangre. “En ese momento comencé a infiltrarlos con medicamentos biorreguladores con muy buenos resultados”, explica la especialista, presidenta de la Sociedad Chilena de Medicina Física y Rehabilitación.

Después de esta experiencia, la doctora Ritter hizo una capacitación intensiva en Europa en la técnica llamada biopuntura, que consiste en inyectar una combinación de medicamentos biorreguladores, naturales, que vienen en ampollas. Según la especialista, quien se desempeña en la Unidad del Dolor del Hospital del Salvador y en la Clínica Avansalud, se trata de una técnica eficaz y casi sin efectos secundarios.

“En lo que más la uso es en el llamado dolor miofascial, que son esos nudos que aparecen en los músculos, sobre todo en el cuello y en la parte alta de la espalda, y que producen dolor”, explica. En este caso, según el tamaño del nudo, se pueden necesitar entre dos y ocho pinchazos. Para ello se usan las agujas más finas que existen, por lo que casi no hay dolor.

Uso creciente

Otro problema que trata la biopuntura son las tendinitis y las artrosis leves a moderadas, sobre todo en articulaciones pequeñas como las de la mano. “El 80% de estos pacientes anda bien con una sesión, pero si en el control posterior queda algo de dolor, se repite la infiltración”, dice Ritter. Lo bueno es que al inyectar directamente en la zona del problema la respuesta es más rápida.

Son estos resultados los que han ido persuadiendo a los médicos para usar esta técnica. Asimismo, la Universidad Mayor creó un diplomado en medicina biorreguladora, que este año realiza su quinta versión. Esto ha permitido capacitar a más de 200 médicos.

“Al ser una técnica que prácticamente no tiene complicaciones, la puede usar también un médico general que conozca la forma de hacerlo”, dice la doctora Cecilia Piotrowski, fisiatra de los hospitales Regional de Rancagua y del Clínico Fusat.

Su percepción es que los médicos están usando más la biopuntura y la medicina biorreguladora en general. “Los traumatólogos la usan porque tienen buenos resultados, y ahora también la están indicando los médicos de la atención primaria”, afirma.

La doctora Cecilia Plaza, médico familiar de Clínica Indisa, explica que este tipo de medicina funciona con las mismas bases de la convencional y se complementan muy bien. Es decir, se hace una historia del paciente, se practica un examen físico y se le piden exámenes de laboratorio o de imágenes, si es necesario. Con eso se hace el diagnóstico y se indica el tratamiento. Este puede ser inyectable, pero si la persona tiene fobia a los pinchazos, se le pueden dar pastillas.

“Nosotros tratamos la inflamación aguda y evitamos que se haga persistente o crónica”, explica la doctora Plaza.

Para esto usan medicamentos biorreguladores que contienen dosis muy bajas de distintas plantas medicinales como passiflora, manzanilla, caléndula y echinácea.

En una primera etapa se desintoxica el organismo y, por ejemplo, una persona con sinusitis puede presentar una secreción de nariz persistente. Luego que se limpia el organismo, este recupera su capacidad de autorregularse.

Según la doctora Plaza, esta medicina funciona muy bien en trastornos digestivos funcionales, como el colon irritable, así como en las alergias, cefaleas y fibromialgia.

Las especialistas consultadas coincidieron en señalar que este tipo de medicina es un puente entre la homeopatía y la medicina convencional. Entre otras cosas, porque cuenta con estudios clínicos que respaldan sus productos con evidencia científica.

Diferentes

Aunque sus nombres se parecen, la biopuntura es muy diferente a la acupuntura, ya que en esta última su efecto se logra pinchando agujas en ciertos puntos que trabajan con las energías del cuerpo.

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