¿Cómo ser una persona más flexible?
La flexibilidad nos ayuda a mejorar nuestra calidad de vida, a crecer como personas y a adaptarnos a situaciones imprevistas, pero, ¿cómo podemos ser personas más flexibles?, sobre todo, cuando perdemos el control de las situaciones o lo que planeamos salió mal.
De acuerdo con Jenny Moix, profesora de psicología en la Universidad Autónoma de Barcelona, la flexibilidad es la capacidad de ponerte en los ojos de nuestro interlocutor, de tener apertura.
Fuente : http://bienestar.salud180.com/
Flexibilidad es adaptarse
Pero ser flexible no significa ceder a todo o ser sumisos, implica adaptarse a situaciones impredecibles, ajustarnos a lo que las personas piensan, sienten y son. También significa acoplarnos a las condiciones cambiantes.
Al ser flexibles conservamos nuestro punto de vista, pero al mismo tiempo reconocemos que los demás tiene el suyo y no buscamos cambiar su enfoque. Tampoco le damos siempre la razón al otro.
Las personas que son muy rígidas, es decir, poco flexibles, generalmente buscan tener todo bajo control, al no lograrlo surge la frustración, la ansiedad y la depresión, afirma la psicóloga clínica Andrea Umbach.
Aunque no se puede cambiar de un día para otro, puedes ir cultivando esta cualidad y te impresionarás de lo bien que te sentirás. Aquí algunas ideas para lograr este proceso.
Analiza tu actitud
1. Calma. Toma tiempo antes de dar un sí o un no.
2. Respeta. El sentir y pensar de los demás, así como las reglas sin ser condescendiente.
3. Ábrete. Haz cosas nuevas, busca otras experiencias y escucha ideas distintas.
4. Delega. Sorpréndete con lo que otros pueden lograr por ti.
5. Confía. Hay múltiples maneras de hacer bien las cosas bien, no necesariamente como esperas.
La ciencia misma ha confirmado que las especies que logran adaptarse sobreviven. Esto aplica a nuestra vida, al ser flexibles seremos emocionalmente más estables, aprenderemos a escuchar y a observar con atención para tomar lo mejor de cada situación y desechar lo que no es conveniente.