Consejos para controlar la ansiedad
Se estima que un quinto de la población mundial padece trastornos relacionados con la ansiedad. Aunque parece un engranaje más de la acelerada maquinaria de los nuevos tiempos, es posible combatirlo. Si cree que no tiene tiempo para seguir leyendo, esta nota es para ti.
Fuente: www.revistamujer.cl
Es importante aclarar que la ansiedad es una experiencia universal positiva que se percibe como angustia y surge en respuesta a exigencias o amenazas; como un semáforo que pone en alerta al organismo para adaptarse a una situación nueva. “Una cuota de ansiedad es activante del organismo; el problema es cuando pasa los límites, paraliza. Eso se traduce en cuadros angustiosos y depresivos, en estancamiento del desarrollo personal. Sienten que no avanzan, que sus vidas no tienen sentido”, explica José Pinedo, sicólogo de Red Salud UC. Aunque pueden provenir de distintas actividades, la mayor causa de los trastornos de ansiedad está directamente relacionada con las exigencias laborales adversas y competitivas.
La experiencia del sicólogo del Hospital Clínico de la Universidad de Chile, Felipe Gallardo, indica que la comunicación es una de las grandes vacunas contra estos trastornos. Los problemas que los generan, tanto en la casa como en el trabajo, deben ser resueltos en un clima de tranquilidad. “Las personas deben ser capaces de conversar, pedir, delegar, antes de que sus problemas se conviertan en un foco grave”, advierte.
Los hobbies son recomendados, pero hay que tener cuidado porque también pueden convertirse en otro foco de tensión. “Mucha gente busca actividades para evadir el estrés, pero lo primero es tener buenas horas de sueño, de recuperabilidad, para compensar al cuerpo. No se trata de incorporar más cosas a la rutina. Hay que alivianar la carga”, continúa Gallardo.
Tarea para la casa
– Organizar todas las actividades, de modo que no generen ‘deudas’. No preocuparse si no resultan como fueron planificadas.
– Evitar la sobrecarga de trabajo y de actividades también en casa.
– Caminar antes de llegar a la casa ayuda a separar el trabajo del hogar.
– Crear espacios de tranquilidad.
– Silenciar el teléfono móvil y darse horarios para responder.
– Utilizar técnicas de relajación. Existen desde ejercicios de respiración (exhalando el doble de tiempo que tarda la inhalación) a prácticas como el yoga, masajes y la hidrogimnasia.
– Recurrir a pensamientos positivos para explicarse los eventos negativos.
– Dedicar más tiempo a las personas que se quiere.
– Conversar los problemas con sus cercanos.
– Generar ambientes de sueño y respetar los horarios. Algunos alimentos como manzanas, leche e infusiones ayudan a conciliar el sueño.
– Respetar los horarios de alimentación y evitar estimulantes como la cafeína, el azúcar y la guaraná.
-Desarrollar algún hobbie.