Mujeres y niñas rurales, creadoras de resiliencia climática
Este 15 de octubre pasado, el Día Internacional de las Mujeres Rurales destaca el importante papel que desempeñan mujeres y niñas rurales en la acción climática.
Desde el año 2008, la ONU celebra este día internacional en reconocimiento a la función y contribución de la mujer rural en la promoción del desarrollo agrícola y rural, la mejora de la seguridad alimentaria y la erradicación de la pobreza rural.
Una de cada tres mujeres empleadas a nivel mundial trabaja en la agricultura, y representan 43% de la mano de obra agrícola.
Sus labores son muchas, desde labrar la tierra y cultivar, hasta acopiar combustibles de biomasa, procesar manualmente los alimentos y bombear agua. Pese a ser tan productivas y buenas gestoras, la mayoría de las veces no disponen del mismo acceso la propiedad y el uso de la tierra que los hombres.
Tampoco disfrutan de un acceso equitativo a los servicios públicos, como educación y asistencia sanitaria, infraestructuras, créditos, materiales agrícolas y acceso a mercados o cadenas de productos de alto valor.
Las barreras estructurales y las normas sociales continúan limitando el poder de las mujeres rurales en la participación dentro de sus comunidades, dejando su labor no remunerada e invisible.
La situación de desigualdad de género, que tiene muy pocas excepciones a nivel mundial, está empeorando debido a los efectos del cambio climático y la degradación de los recursos naturales.
En el 80% de los hogares sin agua corriente depende de las mujeres y niñas conseguir agua.
Una de las formas más efectivas de frenar las amenazas que plantea el cambio climático es abordar la desigualdad de género, pues las mujeres empoderadas tienen mayor capacidad para responder a los cambios y desempeñan un papel importante en la adopción de tecnologías con bajas emisiones.
Aunque los líderes mundiales se han comprometido con la igualdad de género, los progresos aún son lentos. Los logros en esta esfera son esenciales para avanzar en la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.
Escuchar a las mujeres y niñas rurales es fundamental para difundir su conocimiento sobre el cambio climático e instar a los líderes mundiales para adoptar medidas que favorezcan su participación.
Apoya proyectos orientados a mejorar la capacidad productiva de mujeres rurales a través de las aportaciones a microfinanzas y MyLand Initiative.
Fuente: multimediosagreste.org / Foto: Lianne Milton. ONU Mujer