Nuevos caminos de la radiestesia
La radiestesia, técnica que posibilita que cada ser humano pueda captar las energías de su entorno, toma nuevos rumbos, abandonando sus tradicionales instrumentos para incursionar en caminos innovadores.
Fuente : http://www.revistasomos.cl/
Por Juan Guillermo Prado O.
La radiestesia, tradicionalmente usada por los campesinos para buscar venas de agua subterránea en zonas de secano o cuando hay sequía, en el transcurso del año pasado salió de su anonimato y apareció en las pantallas de televisión a través de personajes pintorescos y controvertidos.
Sobre este y otros temas relacionados con la radiestesia conversamos con el ingeniero chileno residente en Ecuador Sergio Manusevich, quien comienza narrándonos cómo llegó a interesarse en esta disciplina. Hace unos 16 años, tenía en Quito una fábrica y una tienda de muebles, las que funcionaban perfectamente bien. Un día llegó una persona a ofrecerles algunas antigüedades originales a consignación; les pareció una muy buena idea porque les servirían como decoración y, al mismo tiempo, ganarían una comisión.
“Sin embargo –continúa-, desde el día que estas antigüedades entraron a nuestro negocio todo cambió de manera muy brusca y extraña: los clientes llegaban hasta la puerta, se detenían como si existiera una cortina invisible, solo miraban las vitrinas y se iban. Así pasaron unas dos semanas en las que nadie ingresó a nuestra tienda”.
Como es de imaginar, pensaron que estaban haciendo algo mal; examinaron los diseños, la calidad de los objetos; en fin, hicieron todo lo que normalmente se haría en estos casos hasta llegar a un camino sin salida. Entonces, su esposa le habló de una psicóloga que revisaba las energías sutiles de las personas y los lugares. Sergio la escuchó y, como era de esperar, se rió un poco y le dijo que tenían un problema de ventas muy serio y que no estaba para bromas. Ella insistió, y al final de la discusión, él consintió, ya que a esas alturas no perdían nada con realizarlo.
“Llamamos a la persona –recuerda-, quien nos pidió que estuviéramos mi esposa y yo presentes. Cuando llegó y comenzó a revisar el lugar, yo miraba incrédulo cuando, repentinamente, sacó un péndulo de su bolsillo y comenzó a analizar las cosas, en especial los artículos dejados a consignación. Esta persona no sabía nada de esos objetos y acertaba con absoluta precisión cuáles eran. Devolvimos las antigüedades, nuestro negocio mejoró casi instantáneamente, pero algo quedó en el ambiente, así que éste fue cayendo poco a poco hasta que al final tuvimos que cerrar”.
A partir de ahí, Sergio se interesó en el péndulo, descubrió que este arte-ciencia se llama radiestesia, y que existe desde hace miles de años.
El uso de varillas es frecuente en la búsqueda de aguas subterráneas en zonas áridas.
El uso de varillas es frecuente en la búsqueda de aguas subterráneas en zonas áridas.
Arte-ciencia milenario
– Como ingeniero y radiestesista ¿qué opinas respecto a la aparición de personajes premunidos de péndulos y varillas radiestésicas en nuestra televisión?
– El estudio y el ejercicio de la radiestesia son herramientas muy eficaces y poderosas que nos permiten obtener muchas respuestas que las ciencias tradicionales no nos dan o no tienen; por eso, opino que presentar a la radiestesia a través de personajes extraños, misteriosos, pintorescos o controvertidos es incorrecto. Eso no es radiestesia.
Admito, sin embargo, que la radiestesia debiera ser difundida por televisión, pero acercándola más hacia la cultura como un arte-ciencia milenario, y sin caricaturizarla ni ponerla a la altura de métodos de adivinación como la cartomancia, la magia, mentalistas o psíquicos, conocimientos que sólo son atribuibles y ejecutables por ciertas personas que poseen dones o poderes especiales.
El 95% de las personas podemos aprender radiestesia a través de estudios y mucha práctica; no se necesita ningún don especial ni nada semejante, aunque sin duda existen personas naturalmente capacitadas que logran mejores resultados porque tienen un mayor poder de concentración y una mejor percepción de los campos electromagnéticos que los rodean.
– ¿Sus conocimientos de ingeniería le han servido para la práctica de la radiestesia?
– Absolutamente; al profundizar mis conocimientos en este arte descubrí la geobiología, ciencia que estudia la relación de la Tierra con los seres vivos. Tomé cursos en otros países, y fui entendiendo la importancia y la influencia que estos conocimientos tienen en nuestra vida diaria, lo que nos afecta, y lo que las ciencias oficiales no nos explican.
Después de mucho estudiar y practicar radiestesia y geobiología, me di cuenta que si bien era muy importante aprender a encontrar las causas de muchas dolencias y problemas de las personas y animales por fenómenos no esclarecidos por la ciencia oficial, esto no me sería útil si no encontraba las soluciones a ellos, soluciones que son referidas en alguna literatura al respecto, pero considerablemente extemporáneas y muy subjetivas.
Ya sin caminos, comencé a buscar otras vías más enfocadas en la tecnología, y es ahí donde toma importancia el ser ingeniero, porque todas estas alteraciones que sufren los lugares y las personas son mayoritariamente producto de ondas eléctricas, magnéticas o electromagnéticas de baja frecuencia, que se identifican por unidades de medida denominadas miligaus y nanoteslas, y que éstas son telúricas, cósmicas y otras creadas por el ser humano.
Así, comencé a unir cabos sueltos para abrir nuevas puertas a conocimientos hasta hace poco desconocidos que he denominado “radiestesia avanzada”. No la llamo “moderna” porque en unos años ya será antigua.
El péndulo es excelente en el análisis de la energía en las personas y para efectuar armonizaciones de sus centros energéticos.
¿Péndulo o varillas?
– Sabemos que la radiestesia es muy antigua; tradicionalmente primero se utilizaron varillas y hoy se ha popularizado el uso del péndulo. A su juicio, ¿qué instrumento es más certero?
-Existen vestigios de que este conocimiento se utiliza desde hace unos diez mil años, aunque el término radiestesia fue acuñado recién en 1933 por el abate francés Alexis Bouly, en un congreso de la especialidad realizado en Avignon.
El healtywave, un nuevo instrumento que sirve para neutralizar los efectos negativos de los campos energéticos nocivos.
El healtywave, un nuevo instrumento que sirve para neutralizar los efectos negativos de los campos energéticos nocivos.
Considero que las varillas y el péndulo son de exacta asertividad, como también cualquier otro objeto que posea buen peso y equilibrio. Ambos, como instrumentos de la radiestesia, cumplen idénticas funciones con la misma precisión; solo por efectos prácticos son utilizados para actividades diferentes.
El péndulo es excelente en el análisis de la energía en las personas y para efectuar armonizaciones de sus centros energéticos. También, y específicamente por su tamaño, lo uso para prospectar en mapas la búsqueda de objetos perdidos, personas extraviadas, hacer prospecciones a distancia –lo que denominamos telerradiestesia-, o para trabajar en lugares muy pequeños.
Las varillas, por su parte, son extremadamente útiles en la búsqueda de pozos de agua o en prospecciones en lugares abiertos. Utilizo ambos instrumentos según sea el caso.
En la búsqueda de aguas subterráneas, determino con varillas el lugar exacto donde hay que cavar el pozo, y uso el péndulo para saber la profundidad y el caudal. Es muy importante explicar que los instrumentos utilizados en la radiestesia son solo amplificadores y traductores de las percepciones que cada uno obtenga de las preguntas realizadas.
Antiquísimo conocimiento
– Siendo chileno residente en Ecuador, ¿cuál es la realidad de la radiestesia en ese país? ¿Los aborígenes ecuatorianos la utilizaron o utilizan?
– Soy socio fundador de la Sociedad de Radiestesia y Geobiología del Ecuador, fundada en 2011 con el objetivo de dar a conocer estas artes para responder a muchas preguntas que por cientos años han sido atribuibles a magia negra o para estudiar lugares que poseen ciertas características mágicas o de poder.
Por otro lado, todos y durante miles de años hemos utilizado la radiestesia y la geobiología, quizás con otros nombres, pero siempre han estado presentes. Muchas culturas ancestrales construyeron sus viviendas en lugares libres de geopatías, esto es zonas energéticamente bajas o negativas, y levantaron sus templos en zonas energéticamente positivas. Además, utilizaron las fuerzas de las aguas subterráneas que, al correr bajo la tierra, friccionan con las piedras y generan electrones -corriente eléctrica positiva- para crear bajo sus templos una especie de esfera altamente energética que fuera perceptible por las personas, lugares que servían como espacios de meditación y oración, pero que por esa alta carga de ionización positiva no eran zonas habitables.
Sergio Manusevich muestra cómo se instala el healtywave en las casas.
Sergio Manusevich muestra cómo se instala el healtywave en las casas.
Uno de los aspectos increíbles de estas culturas fue el haber creado cercas virtuales para mantener a sus animales en espacios abiertos. Con una técnica muy elaborada, levantaban unos pequeños montículos de piedra en posiciones muy específicas y a cierta distancia una de otra, creando un círculo eléctrico de baja frecuencia aprovechando la polaridad de todos los elementos y que los animales perciben y no traspasan. Las he visto en áreas rurales al sur del Ecuador y fueron construidas en la época incaica.
Otro de los aspectos que nos indican que los indígenas han utilizado la radiestesia y la geobiología durante miles de años es la forma en que cultivaban sus alimentos. Ellos sabían perfectamente que el planeta tiene redes globales eléctricas y magnéticas, positivas y negativas, que lo rodean de norte a sur, de este a oeste, de noreste a suroeste y de noroeste a sureste. Este conocimiento les permitió y les permite saber exactamente dónde sembrar para obtener más y mejores frutos, técnica que conozco también porque hasta hoy los indígenas y campesinos en Ecuador la siguen utilizado en sus sembrados.
– ¿Se enseña radiestesia en las universidades ecuatorianas?
– No, la radiestesia no es una carrera profesional ni técnica, y creo que no lo será, al menos por bastantes años más, aunque sí existen hoy, en Europa, universidades abiertas al conocimiento y que enseñan la geobiología de forma optativa en carreras como arquitectura, ingeniería civil y diseño.
Relación con la mente profunda
– En siglos, la radiestesia no ha innovado en sus prácticas. ¿Cree que habría otras formas más renovadas en su aplicación?
– Es cierto que no ha innovado: muchos libros sobre esta materia son copiados unos de otros, incluso los dibujos; todos se refieren a los mismos casos, y nos enseñan las mismas herramientas. Otros nos hacen caminar por vías muy encumbradas espiritualmente, que muchas veces nos confunden, y no dejan claro si la radiestesia es algo religioso, místico o tecnológico.
La práctica de esta arte-ciencia se relaciona en forma directa con nuestro inconsciente o mente profunda, que sigue siendo igual desde hace miles de años. Si bien la humanidad ha crecido en conocimiento tecnológico, hay que reconocer que de manera simultánea han disminuido notablemente las destrezas y las capacidades para comprender nuestro entorno y la convivencia con el planeta que habitamos; nuestros receptores sensoriales han dejado de usar varios sentidos, como la percepción, la intuición y la ubicación espacial.
Indudablemente, hoy existen otras formas más avanzadas para aplicar la radiestesia, y lo digo porque he comprendido que todos los objetos y las cosas poseen una especie de código de barras energético; nada es igual a otra cosa, es como una huella digital.
Al respecto, pensé: ¿por qué no aprovechar el avance de las actuales tecnologías? Comencé a buscar equipos electrónicos que logren captar y medir frecuencias extremadamente bajas de campos eléctricos, magnéticos, electromagnéticos y de microondas; equipos para detectar el gas radón; aparatos que detecten campos de alta frecuencia, de radioactividad; equipos para medir la resistencia del cuerpo humano a los campos eléctricos, en fin, aparatos que sin duda nos podrían ayudar a encontrar o crear un hábitat sano.
Al llegar a ese punto mi pregunta era: ¿Puedo usar esa tecnología en la radiestesia o simplemente ya no sería radiestesia lo que pretendía hacer? Luego entendí que los aparatos, si bien miden las excitaciones de los diferentes campos, no indican qué genera esa variación. Así, tuve que volver al péndulo o a las varillas para preguntar cuál era el origen de esas alteraciones. Entendiendo profundamente esto, podremos comprender lo que he llamado “radiestesia avanzada”. A partir de ahí conseguiremos investigar más a fondo y técnicamente el mundo que nos rodea y dar soluciones.
La geobiología y la radiestesia son ciencias que nos ayudarán a disipar los enigmas de los lugares y de la vida en la Tierra en que vivimos.
Avances actuales
– En su trabajo radiestésico, ¿ha encontrado algún nuevo instrumento…?
– Después de numerosas investigaciones, mucha práctica e innumerables fracasos, he llegado a entender los campos energéticos sutiles y por qué las personas sufren mucho más en el mundo de hoy, principalmente en las grandes ciudades.
El estudio y el ejercicio de la radiestesia son herramientas muy eficaces y poderosas que permiten obtener muchas respuestas que las ciencias tradicionales no nos dan o no tienen…Uno de los problemas más serios para la vida en la Tierra son los campos eléctricos y magnéticos que emiten las redes globales energéticas telúricas, las redes cósmicas y todo lo que hemos creado los seres humanos, campos denominados desarmónicos, es decir campos que fluctúan en forma muy diferente en amplitud, ancho y largo de ondas a los que los seres humanos estamos acostumbrados. Como sabemos, el cuerpo humano funciona eléctricamente; sus ondas se miden en hertzios y son conocidas como “ondas armónicas”.
Para solucionar esto, desarrollé un aparato que tiene una onda muy específica, que en los ambientes tanto cerrados como abiertos y por efecto de rebote, vuelve a reordenar las ondas electromagnéticas desarmónicas entregando un espacio muy armónico y saludable para las personas, plantas y animales.
– En pocas palabras, ¿en qué consiste y qué utilidad tiene?
– El aparato sirve para compensar los efectos negativos de los campos energéticos nocivos. Es un método de alta tecnología para mejorar el flujo de energía del cuerpo, crear un ambiente más agradable y saludable y aliviar los efectos de las zonas geopáticas estresadas.
Más información: radiestesia2012@yahoo.cl
Nos puede ayudar a mejorar la calidad de vida; por ejemplo a dormir más profundamente, a relajar el cuerpo y la mente, a sanar las lesiones con más rapidez, obtener más energía física y mental, eliminar el stress e incluso puede ayudar a animales y plantas.
A este aparato lo he llamado healtywave -onda saludable o sana-; se puede instalar en casas, oficinas, fábricas, en fin, en cualquier lugar. Su utilidad es absolutamente sorprendente; he podido comprobar que en muchos casos controla y regula la presión sanguínea de las personas, y por consecuencia, se recuperan mucho más rápido de ciertas dolencias, duermen mejor, comen mejor, y por lo tanto, su rendimiento es mucho mejor en todas sus actividades.
– Finalmente, ¿existe la especialización en radiestesia?
– Para mí, la geobiología es la especialización de la radiestesia; ambas se fusionan perfectamente, y son ciencias que nos ayudarán a disipar los enigmas de los lugares y de la vida en la Tierra en que vivimos.