Un Chile más humano – MCA Festival

Lo que convencionalmente define a un país son las fronteras que lo separan de otros territorios, así como las personas que nacen y viven dentro de sus límites. Expertos dicen que los límites físicos y externos son la proyección del interior humano no integrado, lo que lo lleva a desarrollarse generalmente en áreas parceladas y especializadas. Esto divide a las personas no sólo en estos territorios físicos, sino también en las formas de entender el mundo.

¿Cuál es el ingrediente cuya fuerza permitiría fundir e integrar estos territorios internos, para que aparezcan nuevos mapas culturales y sociales? Para un grupo de filósofos, biólogos y pensadores como Gastón Soublette y Humberto Maturana aquello capaz de derretir duras corazas en las personas para transformarlas en seres más amables y comprensivos es el amor, entendida como una fuerza que permite transformar todo en algo mejor.

Fuente : diario.elmercurio.com/

 

De acuerdo con esta concepción ser más humano significaría la capacidad de sintonizar con los otros desde el amor. Esa energía inclusiva, abierta, viva y no temerosa, que mueve a la confianza y que lleva a las personas a actuar desde la pasión y la verdad. Para Soublette y Maturana eso sería extensible a un país entero. Y como son las personas que habitan un país quienes deciden hacer un cambio en sus vidas, depende de ellos entonces decidir transformar su país en algo mejor.

 

Una educación espiritual

 

“La expresión ‘Un Chile mejor’ debe ser liberada de los lugares comunes del crecimiento económico y del progreso tecnológico, más bien debe ser referida únicamente a la calidad humana de sus habitantes”, dice Gastón Soublette, filósofo experto en estética y profesor de la UC, quien plantea que dicha calidad se mide por dos parámetros fundamentales, la virtud y la sabiduría, sin las cuales no habría calidad humana. “La virtud se define en referencia al recto obrar y el amor al prójimo. La sabiduría consiste en conocer el sentido de la vida y asumirlo”, explica, al mismo tiempo que sostiene que para producir un efecto en la conducta humana que nos lleve a alcanzar ambas cosas, que se requiere de una fuerza espiritual que trascienda el intelecto. Es decir, no sólo entenderlas, sino vivirlas consciente y profundamente para que den frutos.

 

La espiritualidad a la que alude Soublette no tiene relación necesariamente con el ámbito religioso, sino más bien con el encuentro íntimo a que cada ser humano aspira tener con la esencia que está en su interior. Y a eso justamente apunta una educación más humana, a potenciar dicho encuentro con nosotros mismos que desarrolle los potenciales de amor.

 

“¿Dónde reside esa fuerza entre nosotros? Y si yace dormida, ¿cómo despertarla? ¿Quién está capacitado para hacerlo en la sociedad chilena fuera del ámbito confesional?”, termina reflexionando el destacado pensador.

Humberto Maturana sabe de romper fronteras. El reconocido biólogo y epistemólogo, que junto a Ximena Dávila fundó el Instituto Matríztico, ha llevado su trabajo realizado en el área de la biología a encontrarse con el amor, humanizando desde hace décadas la labor científica.

Para él, la ciencia tiene que ver con el desear saber. Recalca que los fundamentos de la ciencia están en las emociones, “que son las que fundan el quehacer de la ciencia, y son guiadas y moduladas desde la curiosidad, por los deseos del que hace ciencia desde la biología del amar. Porque es desde ahí que se abre un espacio relacional en que el otro, la otra o lo otro surgen desde su legitimidad -lo acepto, lo veo-, fundamento que hace posible el preguntar y el explicar, constituyendo la curiosidad la pasión que lleva a la acción”.

Maturana siempre ha puesto especial énfasis en el observador. Explica que la ciencia tiene que ver con quien pregunta, con su actitud, con su pasión, consciente e inconsciente, desde donde surge “la pregunta que pregunta curiosa” hecha siempre por un observador humano, “observador humano cuyo observar tiene un fundamento emocional, que se basa en sus deseos, preferencias y sentires”, sostiene. Por lo tanto, no se puede independizar la exploración que nos lleva a responder preguntas, de todo el universo que rodea y que además tiene en su interior quien da explicaciones del mundo. Un humano explicando lo humano, necesariamente tiene que conectar con lo que a él le sucede, ya que en su observación determina de una u otra forma lo que está observando. Es así como la ciencia, comúnmente asociada a resultados objetivos, se ve humanizada por quien indaga, ya que aplica sus emociones y sentimientos a dichas deducciones.

 

“La ciencia no ciega si el científico no se deja atrapar por la ambición de poder, por el deseo de riqueza o por la búsqueda de la fama que su práctica puede ofrecer”, concluye Maturana.

 

¿El comienzo de una nueva era?

 

Los destacados astrólogos Pedro Engel, Jaime Hales y Gonzalo Pérez se reunirán el próximo 8 de septiembre en MCA Festival 2012 (ver recuadro), donde se referirán a las proyecciones que auguran un prometedor tiempo de cambio para la humanidad con un despertar de la espiritualidad. Hacer una visualización no determina el futuro, que por lo demás está en permanente construcción, pero sí nos permite leer posibilidades que se establecen de acuerdo a cómo nos estamos moviendo hoy, y donde lo aconsejable es vivir plenos el presente, para que la confianza actual sea la que determine las bases de algo nuevo, lejos de vaticinios catastróficos tan en boga.

 

En este sentido, Gonzalo Pérez asegura que frente a estas temáticas se ha intentado encontrar respuesta en el conocimiento esotérico, el simbolismo y la astrología, pero que no existen allí las certezas deseadas, sino solamente lentes para mirar mejor los procesos de la realidad.

 

Es así como en el mundo esotérico se habla del fin de un paradigma y del nacimiento de una nueva era. Para Pedro Engel, las palabras clave del momento son tan simples como decir con mayor frecuencia: “Sí, gracias, por favor, te amo”.

 

Completa esta trilogía, Jaime Hales, para quien para generar un cambio tiene relación con la actitud. “Yo digo, es necesario hacer un gesto amable cada día, estar consciente de hacer un gesto amable por otro. Eso va generando una energía nueva”.

 

El humor como armonizador social

 

Un gran ejercicio para lograr un cambio es reírnos de nosotros mismos. Reír, divertirse en la vida con todo lo que nos trae, constituye una excelente forma de no quedarnos estancados y superar cualquier obstáculo, ya que permite cambiar el prisma con que se miran las cosas.

 

Coco Legrand, uno de los humoristas más importantes de nuestro país, quien basa sus monólogos en los rasgos psicológicos más típicos de la sociedad, explica que el humor es algo mucho más profundo y trascendente que ser bueno para contar chistes, echar la talla o bromear, como la mayoría cree en Chile. Sostiene que “el humor es una actitud distendida para enfrentar la vida y observarla polifacéticamente. La distensión crea espacios de confianza, vínculos auténticos y por lo tanto relaciones más humanas y armónicas”.

 

“En ninguna universidad se enseña a las personas el arte y la ciencia de observar la vida con humor, es por eso que desde hace varios años, junto a mi amigo Jaime de Casacuberta (Coach y experto en P.N.L.) iniciamos la cruzada para difundir las bondades del humor”, destaca el humorista.

 

Sobre la tarea de transformar a Chile en un país más humano, Coco Legrand enfatiza que “podremos hacerlo cuando aprendamos a desdramatizar la existencia, que de por sí ya es compleja”.

 

Una iniciativa inédita

 

En el primer mega evento que se realiza en Chile -MCA Festival 2012, Mente, Cuerpo y Alma-, de esta índola, habrá charlas y foros en ochosalas paralelas con más de 200 actividades y 100 expertos de diversas especialidades relacionadas con el desarrollo humano. También habrá talleres y demostraciones gratuitas de yoga, mandala, biodanza, meditación, Feng-Shui, Tai Chi, risoterapia, astrología, ancestrología, bioenergética, sueño, eneagrama, terapias complementarias, clases de cocina saludable y desarrollo de huertos; además de una sala de cine y documentales, y conciertos de los afamados músicos Joakín Bello y Devakant.

(El Mercurio Vida Actual 1/9/2012)

Todo esto se se va reflexionar ,conversar,practicar y disfrutar en MCA FESTIVAL 2012 www.mcafestival.cl